la dualidad: ciencia vs religion

“Los conceptos y principios fundamentales de la ciencia son invenciones libres del espíritu humano”
Albert Einstein


Algunos grandes -¡que decir!- enormes científicos de todos los tiempos, han reconocido que, el detonante fundamental que les ha permitido llegar a establecer preceptos o leyes científicas, es la creatividad. Qué la práctica constante -y la valentía- para cuestionarte y profundizar en tu interior, forma parte esencial de la ciencia.

La dualidad del individuo consiste en dos partes: la razón vs. la intuición, el hemisferio izquierdo que contiene la capacidad del lenguaje y las operaciones lógicas vs. el hemisferio derecho que controla las capacidades artísticas y espaciales.
Visto de manera global como características de la especie humana. la dualidad se podría determinar como la ciencia vs. la religión.
La ciencia es el conjunto de leyes que han sido observadas y comprobadas por el método científico, es decir: la razón en lo individual. La religión, que algunos la hacen derivar de la palabra latina religere en el sentido de preocupación, de prestar atención, de práctica intimista;[ ] del término relegere como actividad social y legal perteneciente a lo público y a la esfera del Estado;[ ]y de religere como atadura y unión con lo divino a través de la moral (S. Agustín). Y desde el punto de vista de su servidora redactora, la religión es la creatividad en lo individual del hombre para explicarse los misterios de la vida. Permítame darle algunos argumentos.

La creatividad libre del alma al fin y al cabo, le ha permitido al hombre explorar nuevos horizontes. Permitiéndole así, ser capaz de explicarse de manera racional y matemática los fenómenos de la naturaleza.
Si analizamos la creatividad siendo esta una cualidad exclusiva del hombre, (aunque también sabemos que algunos animales son capaces de resolver los problemas usando su creatividad) obtendremos que esta es una característica vital de un ser más evolucionado. Solo los seres evolucionados, tendrán la capacidad de crear. Y para nuestro interés en este momento: la capacidad de “crear” respuestas hacia su propia existencia.

Decía Einstein que hay dos formas de ver la vida, ya sea, pensar que los milagros no existen o bien, creer que todo es un milagro.

Un ejemplo que nos permite entender la convivencia entre ciencia y religión es la invención del telescopio. Que fue inventado en 1609 y permanece casi intacto hasta la fecha. Inventado por Galileo Galilei, el telescopio nos abrió los ojos al macrocosmos y a las maravillas de la bóveda celeste, desafiando a la iglesia y, poniendo en tela de juicio un dogma fundamental en esa época: que la tierra no era el centro del universo.
El telescopio demostró que el sol es el astro más poderoso de .la Vía Láctea y que, en comparación con éste, la tierra es, incluso, pequeña. Galileo probó lo anterior no ante curiosos pupilos sino ante el Santo Oficio, quien lo nombró hereje por contradecir las sagradas escrituras. Un 24 de febrero de 1616 La Inquicisión determinó sobre el descubrimiento de Galileo que “ desde el punto de vista filosófico merece censura, mientras que del ángulo teológico es errónea por lo que respecta a la fé”.
En científico-filosofo no se dejó intimidar y mandó su respuesta de inmediato en una carta.
“Es costumbre de las escrituras decir muchas cosas que son diferentes de la verdad absoluta y que a las conclusiones físicas, las cuales han demostrado ser verdaderas, no se les debe dar un lugar mas bajo que a las pasajes escrituras, sino que uno debe aclarar como dichos pasajes no son contradictorios”
Galileo Galilei
Los escépticos han retado dogmas religiosos mediante la comprobación científica, ganando adeptos durante el devenir de la historia. La comprobación de la verdad mediante la razón para explicar los sucesos de la naturaleza es la esencia misma que, como especie, nos hace diferenciarnos de las demás. La experiencia, como forma para explicarnos los sucesos, es una parte fundamental de la psique humana.
Por esto algunos escépticos y científicos, siendo fieles a su naturaleza, han comprendido que la infinidad de misterios de las leyes físicas, sólo se compara con la grandeza del espíritu. La iglesia, actualmente, no se ha podido quedar atrás, viéndoselas negras para redefinirse, actuando en ocasiones en pro de la ciencia y las verdades comprobables mediante leyes científicas que han contradicho algunos dogmas como la teoría de la evolución.
La religión y la ciencia aunque para algunos, distantes y contradictorias, encuentran en ocasiones un punto en común, un punto de acuerdo. Los misterios del universo, son tan increíbles como cualquier idea concebida por la mente humana. Que así como el universo (del cual se ha probado está en constante expansión) todo el conocimiento que habita en las mentes de los hombres, forma parte de esta infinidad. Así pues, los misterios del universo serán tan inmensos tanto más el hombre pretenda descubrirlos.
La infinidad de pensamientos que generan nuestras funciones neuronales (creatividad) es igual a la infinidad del espacio -por descubrir- tanto fuera como dentro de nosotros.
Y solo para mi muy particular forma de pensar, concluiría de la siguiente manera: los misterios del hombre solo podrán ser explicados mediante la imaginación de creernos hijos de Adán y Eva en conjunto con la razón de sabernos provenientes de varias eras de cambios evolutivos La razón queda para comprobar que la ciencia siempre se quedará corta a comparación de la inmensidad y maravilla de los misterios de Dios.

2 comentarios:

Rudy Argenti dijo...

Dualidad ciencia VS religión: Una cosa son los convencionalismos de lo que es sagrado para Israel (su territorio, Jerusalén y su templo, su pueblo, sus ancestros, los hechos y directivas de sus ancestros, que demarcan la ecumene Abrahámica; y otra cosa son los universalismos del camino ecuménico por el que camina la humanidad hacia su desarrollo espiritual enmarcado en el fenómeno espiritual de la trasformación humana. El fideísmo bíblico lleva a la religión organizada a círculos viciosos que impiden a sus seguidores encontrar la salida a los laberintos mentales del proceso fantástico de la realidad que los hace alucinar, convirtiéndolo en una potentísima incubadora de generaciones de estultos en gran escala. El subdesarrollo espiritual de los pueblos cristianos se debe a los falsos valores del fideísmo bíblico que promueve la religión chatarra judeo cristiana en que hemos sido adoctrinados desde la infancia. La in-completitud de la ciencia la lleva a demarcar campos del conocimiento, deslindar competencias y formular nuevas teorías y paradigmas que den respuesta a las nuevas incógnitas y paradojas. La fenomenología de la transformación humana, primera premisa de la triada preteológica, describe la relación entre las emociones y los automatismos que nos impulsan inconscientemente a causa de los prejuicios que nos han inculcado. El holograma de Dios reflejo en nuestro espíritu se manifiesta en todo su esplendor en Cristo. El humanismo secular cristiano toma a Cristo como ejemplo de lo que es la trascendencia humana, por eso lo sigue, no como Dios, sino como hombre. Es hora de impulsar nuestro desarrollo espiritual, promoviendo los valores supremos de la trascendencia humana y la sociedad perfecta que promueve el humanismo secular cristiano: http://www.scribd.com/doc/17143086/EXPLICACIÓN-CIENTÍFICA -DE -CRISTO -Y -SU -DOCTRINA –FORMULADA -POR -LA -FILOSOFÍA -CLASICA -Y -MODERNA

Rudy Argenti dijo...

Los acertados conceptos védicos del continuo eterno increado, sin principio ni fin, en constate transformación y expansión, de billones de galaxias palpados a través de la experiencia de nuestro espíritu, coinciden con el principio de la termodinámica que establece que la energía no se crea ni se destruye solo se transforma, constante que sigue la materia y la energía constitutiva del universo que pasa de lo manifestado a lo in manifestado al ser devorados los mundos por vórtices gravitacionales que engullen galaxias; lo cual, coincide con las teorías de la relatividad general y la mecánica quántica formuladas por los astrofísicos tratando de explicar la curvatura del tiempo-espacio y las inconmensurables fuerzas gravitacionales manifiestas la expansión del universo corroborada en 1929 por Edwin Hubble y en las observaciones de las supernovas, las enanas blancas y los quásares, los pulsares, los hoyos negros; lo cual evidencia las potencialidades de nuestra espíritu para ir más allá de lo evidente, más allá de las limitaciones de nuestro sentidos, más allá de los procesos mentales normales y los contenidos de nuestra mente y conciencia, y resalta la importancia que tiene para la ciencia el conocimiento espiritual. El holograma de Dios reflejo en nuestro espíritu se manifiesta en todo su esplendor en Cristo. El humanismo secular cristiano toma a Cristo como ejemplo de lo que es la trascendencia humana, por eso lo sigue, no como Dios, sino como hombre. Es hora de impulsar nuestro desarrollo espiritual, promoviendo los valores supremos de la trascendencia humana y la sociedad perfecta que promueve el humanismo secular cristiano: http://www.scribd.com/doc/17143433/LA -SABIDURÍA -VÉDICA -ORIGEN -DE
-LA –DOCTRINA –DE –LA –TRASCENDENCIA –HUMANA –INSTRUIDA -POR -BUDA -E -ILUSTRADA -POR -CRISTO